El melodrama en el cine aporta diferentes significados. Las películas de aventura y acción de las dos primeras décadas del siglo XX eran llamadas melodramas en aquella época y fue un género de gran éxito durante su fase muda, influenciada por el teatro popular y el Vodevil de donde procedían la mayoría de sus artistas.
Por otro lado, en la segunda mitad del siglo XX, las películas dirigidas a un cierto público femenino, de características totalmente distintas al género de acción, también fueron llamados melodramas. Los melodramas, en el cine, son un subgénero dentro de los dramas, tratan temas muy emotivos. Tienden a unas argumentos que a menudo tratan con crisis de las emociones humanas, amores o amistades fracasadas, tensas situaciones familiares, tragedias, enfermedad, neurosis, o adversidades físicas o emocionales, pero tratados de forma llena de patetismo. Los críticos de cine, a veces, usan el término en sentido peyorativo, para referirse a relatos poco realistas, llenos de patetismo, algo camp, sobre amores, o situaciones domésticas con personajes estereotipados, a menudo gira en torno a una figura femenina central, dirigido sobre todo a audiencias femeninas. Los melodramas se centrarían en temas familiares, en el deber y el amor.
El término melodrama también abarca películas que tienen una carga emocional o moral muy fuerte o emotiva, atendiendo al gusto de cada persona. La mayor parte de las películas consideradas melodramas se rodaron en los años treinta y cuarenta. En los años cuarenta, los melodramas Gainsborough británicos tuvieron éxito de público. King Vidor dirigió uno de los melodramas más famosos de los años treinta, Stella Dallas (1937), protagonizada por Barbara Stanwyck. Un famoso director de este género, en los cincuenta, fue Douglas Sirk con títulos con Rock Hudson como Escrito sobre el viento o Solo el cielo lo sabe, ambos hitos importantes en el género.
Esplendor en la hierba (1961)
En una localidad rural de Kansas, dos jóvenes que pertenecen a ambientes sociales muy distintos se aman y deciden no separarse jamás; pero la desaprobación de sus familias y ciertos intereses ajenos a sus sentimientos acabarán decidiendo su suerte.
La loba (1941)
A finales del siglo XIX, en una población sureña, la calculadora y despiadada Regina Giddens entabla una lucha sin cuartel contra sus hermanos para quedarse con la herencia familiar. En sus planes no tienen cabida los sentimientos, ni siquiera hacia su marido, un hombre honrado que regresa a casa después de sufrir una grave enfermedad. En medio de la asfixiante atmósfera creada por la desmedida ambición de su esposa, sólo encontrará calor humano en el amor de su hija.
Imitación a la vida (1959)
Lora Meredith (Lana Turner), una actriz viuda en paro, vive con su hija adolescente (Sandra Dee) en Nueva York. Un día, conoce por casualidad a Annie, una mujer negra (Juanita Moore) a la que contrata como sirvienta. Ese mismo día conoce también a Steve (John Gavin), un fotógrafo que se enamora de ella.
Un tranvía llamado Deseo (1951)
Blanche, que pertenece a una rancia pero arruinada familia sureña, es una mujer madura y decadente que vive anclada en el pasado. Ciertas circunstancias la obligan a ir a vivir a Nueva Orleáns con su hermana Stella y su cuñado Stanley (Marlon Brando), un hombre rudo y violento. A pesar de su actitud remilgada y arrogante, Blanche oculta un escabroso pasado que la ha conducido al desequilibrio mental. Su inestable conducta provoca conflictos que alteran la vida de la joven pareja.
Eva al desnudo (1950)
La joven Eva (Anne Baxter), que aspira a convertirse en actriz y triunfar en los escenarios, se las ingenia para introducirse en un grupo de actores de teatro y hacerse amiga y confidente de la famosa y veterana actriz Margo Channing (Bette Davis), gran dama de la escena neoyorquina. El deseo de actuar y los celos la consumen hasta el punto de comenzar a traicionar a sus compañeros en su escalada hacia el éxito. Ella halaga, atrae, seduce, pero también pisotea a todo el que se cruza en su camino: escritores, directores, productores. Sólo un inteligente crítico teatral comienza a adivinar lo que se esconde tras su dulce apariencia, sólo él es capaz de ver a "Eva al desnudo"
Vidas borrascosas (1957)
Sexo, frustraciones y violencia se ocultan bajo la tranquila apariencia de Peyton Place, una pequeña localidad de Nueva Inglaterra, cuya clase alta no está dispuesta a reconocer la irregular conducta de sus miembros.
Mañana lloraré (1955)
Basada en la autobiografia de la actriz y cantante Lillian Roth (Susan Hayward), que conquistó el estrellato en Hollywood, siendo una adolescente; también fue fulgurante su descenso a los infiernos del alcoholismo, al no poder superar la muerte del que iba a ser su marido.
La gata sobre el tejado de zinc (1958)
La inminente muerte del anciano patriarca de una acomodada familia sureña crea una gran tensión ambiental. Uno de sus hijos, Brick, indeciso y apático, se refugia en el alcohol y se muestra completamente indiferente ante la situación, pero Maggie, su mujer, no está dispuesta a contemplar impasible su destrucción. El otro hijo, Gooper, al igual que su esposa, es ambicioso y oportunista.
La carta (1940)La fría y calculadora esposa del propietario de una plantación de caucho en Malasia asesina a un hombre, supuestamente en defensa propia. Pero, de repente, aparece una comprometedora carta cuyo contenido echa por tierra la versión de los hechos de la protagonista.
Los jóvenes caníbales (1960
Retrato de los hábitos de los ricos ociosos. Los protagonistas son dos parejas que comparten un oscuro secreto del pasado. Basada en la novela "The Bixby Girls" de Rosamond Marshall e inspirada en la vida del trompetista Chet Baker.
Susan Slade (1961)
Después de trabajar diez años como ingeniero de minas en Chile, Roger Slade (Lloyd Nolan) regres a Carmel (California) con su esposa Leah (Dorothy McGuire) y su hija de 17 años Susan (Connie Stevens). Durante la travesía en barco, la jovencita conoce al heredero de un magnate que se enamorará de ella. Intensa película dramática que destaca por la magistral fotografía y las espléndidas interpretaciones de los actores.
Con él llegó el escándalo (1960)
El capitán Wade Hunnicutt, el hombre más rico y poderoso de un pueblo de Texas, es un mujeriego empedernido, lo que ha provocado la ruina de su matrimonio. Su mujer, desde entonces, se dedica en cuerpo y alma a su hijo. Sin embargo, llega un momento en que Hunnicutt decide hacerse cargo de su educación llevándolo de caza e iniciándolo en otras actividades masculinas.
Alma en suplicio (1945)
Cuando el segundo marido de Mildred Pierce (Joan Crawford) es asesinado, la policía la interroga. La mujer cuenta cómo ha sido su vida desde que se casó por primera vez y cómo se ha sacrificado para proporcionar a su hija (Ann Blyth) todas las oportunidades que ella nunca tuvo.
Que el cielo la juzgue (1945)
Richard Harland (Cornel Wilde), un joven escritor, conoce en un tren a Ellen Berent (Gene Tierney), una bellísima mujer con la que se casa pocos días después. La vida parece sonreírles, pero Ellen es tan posesiva y sus celos son tan enfermizos que no está dispuesta a compartir a Richard con nadie; tanto amigos como familiares representan para ella una amenaza de la que intentará librarse, provocando la desgracia de quienes les rodean.
Sólo el cielo lo sabe (1955)
Una viuda de buena familia inicia un romance con su apuesto jardinero. A pesar de pertenecer a dos mundos completamente diferentes deciden casarse, pero su amor tropieza con el rechazo de los hijos de la mujer y de su círculo social.
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La solterona (1939)
Cuando Delia Lovell (Miriam Hopkins) está punto de casarse con Jim Ralston, su antiguo novio Clement Spender (George Brent) aparece, y entonces su hermana Charlotte (Bette Davis) tratará de calmarle, al tiempo que sabremos que también ella está enamorada del visitante, quien pronto se ira a la guerra dejàndole como herencia un recuerdo eterno.
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Dulce pájaro de juventud (1962)
Un fracasado aspirante a actor regresa a su ciudad natal convertido en el gigoló de una estrella en declive que promete introducirlo en el mundo del cine. Pero lo que realmente desea es recuperar el amor de su antigua novia, la hija del cacique local.
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El crepusculo de los dioses (1950)
Joe Gillis es un joven escritor de segunda fila que, acosado por sus acreedores, se refugia casualmente en la mansión de Norma Desmond, antigua estrella del cine mudo, que vive fuera de la realidad, acompañada únicamente de su fiel criado Max. A partir de ese momento, la actriz pretende que Joe corrija un guion que ella ha escrito y que va a significar su regreso al cine.
Su único deseo (1955)
Oklahoma, 1900. Cuando Tacey Cromwell, una chica de saloon, y Clint Saunders, un jugador profesional, se enamoran, deciden trasladarse a otro lugar y llevar una vida respetable. Eligen un pequeño pueblo, donde vivirán con el hermano pequeño de Clint y una joven huérfana. Judith Watrous, la celosa hija del banquero del pueblo, se enamora de Clint e intenta apartarlo de Tacey.
Parrish (1961)
Parrish es un honrado, valiente y atractivo joven. Un día su madre recibe una oferta de trabajo para convertir en señorita a una joven malcriada, que es la heredera de un importante productor de tabaco. Parrish se traslada con su madre a la mansión de la acomodada familia y no tardará en ser el centro de atención de todas las jovencitas del lugar.
La heredera (1949)
Año 1849, en Nueva York. Catherine Sloper, una rica heredera, tímida, inocente, poco agraciada y no muy joven, es pretendida por un apuesto joven. Ella se enamora de él apasionadamente, pero su cruel y despótico padre se opone a la boda y amenaza con desheredarla. Adaptación de la novela de Henry James "Washington Square".
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Obsesion (1954)
Bob Merrick, un joven multimillonario, egoísta y engreído, sufre un accidente mientras conduce una lancha motora. En el hospital le aplican provisionalmente el pulmón artificial del doctor Phillips, pero desgraciadamente éste sufre un ataque repentino y muere. Su viuda Helen descubre entonces que está completamente arruinada, a pesar de que los honorarios que percibía su marido eran muy elevados. La razón es que él, sin que ella lo supiera, repartía el dinero, de manera anónima y altruista, entre los necesitados. A partir de ese momento, una serie de extrañas circunstancias mantendrán unidos a Helen y Bob, a pesar de tener caracteres muy distintos.
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Stella Dallas (1937)
Stella, una chica de familia humilde, se casa con el adinerado Steve. Al poco tiempo, tienen una hija y todo parece ir bien, pero las grandes diferencias de educación harán mella en su matrimonio.
Lejos del cielo (2002)
Años cincuenta. Una acomodada y modélica ama de casa de Connecticut lleva una vida aparentemente equilibrada, satisfactoria y programada según los cánones de la familia burguesa americana. Sin embargo, de manera inesperada, tiene que enfrentarse a una gravísima crisis matrimonial y a un mundo exterior que impone límites a las emociones. Un mundo en el que domina el racismo y la intolerancia sexual.
Quiero vivir (1958)
Basada en hechos reales. Barbara Graham es una mujer de pésima reputación que frecuenta bares inmundos y que ha sido condenada por crímenes mezquinos. Dos conocidos suyos cometen un asesinato y, cuando los atrapan, empiezan a sospechar que Bárbara los ha delatado. Para vengarse, deciden inculparla y es condenada a muerte. La mañana del 3 de junio de 1955 entra en la cámara de gas de la penitenciaria de San Quintín (California). Duro alegato contra la pena de muerte.